domingo, 9 de octubre de 2011

Va más allá...


No es que los menesteres acusen silenciosamente los nombres de todos y cada uno de los presentes en esta noche. Es que su simple presencia, así mismo como su ausencia entierra mil corduras, ya que ciega así como encierra en un mundo de total indignidad a más de uno. No es que los colores se agrupen y con su brillo cieguen y aplaquen las ansias, es que simplemente el deseo que consume todo a su paso nunca a existido. ¿Nadie podrá ver cómo y por qué a través de estos lentes? ¿Nadie vera la realidad que las letras ocultan entre la tormenta silenciosa, inexistente?

La tierra se ha mantenido arrida, bacía y ansiosa. No es por falta de personal, de arado, sino de la lluvia misma. ¿Es acaso que todos se olvida que detrás de tal arrides hay necesidad de ser bañada por las aguas? Espero que no, porque de ser así diría que son pésimos amantes, de la peor calaña. Si jamás han sido expuesto a la realidad, disculpen mi sinceridad, más el razonar a abandonado la lógica hasta donde la misma ha tomado la osadía de faltar a su promesa oculta. ¿Porque? Solo por esto, por la realidad que los mismos libros narran y de igual forma el hombre se empeña en realizar y no aprender, ni experimentar por verdades escritas.

El observar en seco y olvidar lo observado, no es la respuesta. No es solo tomar un libro entre tus manos y saber que es una interesante lectura la que aguarda ser leída. Es más allá de esto. Es darle lectura y profundizar en sus páginas. Porque dos páginas no te dicen del autor desea transmitir y enseñar, solo indaga superficialmente mas no profundiza. Sin embargo al tomar y leer, el ser uno con estas páginas a través del tiempo, mientras conoces cada una de las letras y significado de las palabras que llegas a analizar , ver su punto de vista, las particularidades, cambia un mundo el pensar. Esto con el pasar de los años en la actualidad se ha perdido. Por esto y mucho más se debe aprender, y como un viejo amigo decía: “para comer un pastel siempre se comienza con la cereza, así se saborea tal como el creador de la exquisitez deseaba que fuera saboreado el mismo”. Así que si no se comienza con esto no solo quedara en un pasado lo tan necesario para no vivir en el engaño que crea nuestra propia mente al juzgar un libro por su cubierta. Siendo esto aplicable a nosotros los humanos. Salvo que en nuestro caso solo se sabe que nunca terminas de conocer a alguien completamente en vida.